Entrevistas

Entrevista a Elena Levy Yeyati

Por Encuentros

A partir de la entrevista realizada a Elena Levy Yeyati por el Grupo de Lectura Las clasificaciones en la infancia[1] que forma parte del Programa de lectura e investigación El Psicoanálisis en la Cultura (CIEC ) , surgen ciertas afinidades con una de las entrevistas realizadas desde LWT a Roland Gori.

Subrayamos que el psicoanalista advierte un hecho clave: "Estamos constantemente, hoy, en una política de la amnesia. Se cuenta hoy con la amnesia del ciudadano […] Es decir […] con la capacidad de olvido de los ciudadanos para conducirlos". Sobre este punto podríamos ubicar que se pondría en juego un rechazo al inconsciente, solo importa que el sujeto interiorice normas de comportamiento que se exigen de él, sin considerar lo que piensa o siente, llevándose a cabo una reducción de la palabra en la que se pierde una relación de alteridad.

Roland Gori señala que esta política ataca a un cierto tipo de sujeto, uno que reconoce su existencia en relación con los demás.

Es importante reconocer este hecho para poder intentar otra cosa. La apuesta del Psicoanálisis es preservar la relación a un síntoma, alojar una imposibilidad, orientarse en "la defensa decidida por la idea de real" [2], que impida ceder a espejismos que ofrecen prácticas sugestivas basadas en el modelo de relación mando y ejecución, estímulo y respuesta, que se convierten en una suerte de entrenamiento de lo íntimo, de manager del alma.

El hombre piensa con ayuda de las palabras y es en el encuentro entre esas palabras y el cuerpo donde algo se esboza. Poner fin a la palabra es atacar el fundamento mismo del lazo social, de una sensibilidad, es forcluir el interrogante sobre un punto de sufrimiento del sujeto, borrar la dimensión sintomática que hay. Recordamos con Lacan cómo ciertas prácticas discursivas que profesan esos viejos/nuevos "ideales de alto personalismo" que enumeraba en Posición del Inconsciente, consisten aún en negar la "desdicha de la conciencia y [el] malestar de la civilización" (p.815).

Esto lleva a reflexionar sobre los nuevos dispositivos de fabricación de sujetos que aparecen, y responden a una política de homogeneización social basada en una selección de significantes con los que los sujetos deberán identificarse. J-Alain Miller advierte en Un esfuerzo de poesía: la sociedad no es el Otro y por eso Lacan pluralizó el concepto en lazos sociales; que no necesariamente subsumen lo subjetivo bajo el significante. El psicoanálisis obra bajo una política de lo singular, "apunta a un estatus del sujeto anterior a esa captura, intenta despertarlo del fading identificatorio" (p.212), el Todo/s social es cuestionado en tanto "significante amo como ley articulada, […], como distribución jurídica, como derecho" (p.218).

En este sentido se puede considerar un planteo de Ian Hacking, a partir de lo que denomina "fábrica de personas"[3], donde se hace corresponder a sujetos como elementos representativos de una clase, cuyo punto en común es una semejanza en función de la cual los sujetos vienen a quedar reunidos.

Se comienza inventando una categoría, una clase. La dificultad surgirá cuando se haga corresponder a sujetos como elementos representativos de esa clase. Una clase definida por criterios preexistentes.

En un segundo momento, una vez que la construcción se instala, otros sujetos, ya no los originales, comienzan a comportarse como los de esa clase. Son cada vez más puros, más representativos que los primeros incluso, ese es el efecto bucle que se reproduce.

La cuestión del psicoanálisis será despejar la voz del sujeto fuera de una clase, se trataría de una operación de des-clasificación, en la que se lo pretende enmarcar.

NOTAS

  1. Participan de este intercambio: Alejandra D'Andrea, Florencia Rovai, Agustina Albertocchi, Virginia Hornos, Gabriel Goycolea y Fernando Tarragó.
  2. Expresión empleada por E. Levy Yeyati en la entrevista: Procedimiento por tanteos y mediaciones
  3. Cf. Hacking, Ian ¿La construcción social de qué?

 

A continuación se publica la entrevista:

Procedimientos por tanteos y mediaciones

Elena Levy Yeyati es psiquiatra y psicoanalista en la ciudad de Buenos Aires, Miembro de la Escuela de la Orientación Lacaniana (EOL) y de la Asociación Mundial de Psicoanálisis (AMP). Fue Analista de Escuela (AE) período 2017-2020. Sus producciones se inscriben en zonas epistémicas complejas, saberes que comparten campos heterogéneos de difíciles delimitaciones fronterizas donde el uso de los conceptos y el intercambio con las prácticas consecuentes permiten cernir eso que Lacan ubica como lo real: su compromiso con el psicoanálisis, su interlocución con el campo de la clínica psiquiátrica y sus clasificaciones, como también las investigaciones que sustentan clasificaciones y sus críticas más lúcidas, hacen de este intercambio un trabajo epistémico fundamental.

En un texto publicado en la Revista Descartes número 19/20 cuyo tema era Año Freud/el valor del psicoanálisis, usted publica "Poder hacer ver". Plantea aquello que le atrajo del pensamiento de Lacan: la defensa decidida por la idea de real y cierto rechazo al asombroso desprecio del médico por la realidad psíquica. Comenta que el control de su práctica fue crucial para articular intuiciones de un encuentro entre la locura y el psicoanálisis. El resultado del control le permitió derivar esas consecuencias en la dirección del tratamiento psicoanalítico e hizo que el enunciado de Lacan todo el mundo delira cobre un relieve en relación a la práctica y a la defensa decidida de lo real. En la publicación de su tesis doctoral usted termina con esta propuesta ética: "en la práctica es preciso mantener la noción de realidad psíquica". Tomando estas últimas dos cuestiones: el uso del control en el practicante de psicoanálisis y el efecto de una idea decidida de lo real: ¿Cómo se puede articular el universal complejo de: todo el mundo delira y el singular de la locura de cada uno? ¿En qué lugar de la formación ubicar el control de la práctica, para orientar hacia ese núcleo real del sujeto?

– "Todo el mundo delira" es un concepto postulado desde la axiomática del goce, asumiendo que hablar es delirar sobre lo que no se puede hablar. Mientras que de "la locura de cada uno" sólo podemos hablar en singular, es decir, si uno pasa por la experiencia del análisis. En el control, hablar analíticamente de un caso, por ejemplo, es aplicar conceptos generales a propósito de un particular. En la práctica son irrepetibles los sueños de cada uno, lo mismo que su interpretación. Pero el analista debe saber que, por más que avance en su tarea de desciframiento, si ésta conviene, la realización de deseo del sueño es una defensa y que el sueño es un delirio sobre aquello de lo que no se puede hablar: lo que cae bajo la represión primordial o lo que ciñe el ombligo del sueño. Delimitar este campo es un trabajo del control. Muchas veces el control es el espacio donde se formula la construcción de un caso. Entiendo que un caso se construye siguiendo el razonamiento que guía el juicio reflexivo en sentido kantiano. Juzgar es subsumir lo particular en lo universal o lo general (sea este principio, regla o concepto). En el control, no hacemos de los pacientes ejemplares de una clase o concepto general (el histérico, el esquizofrénico, el psicótico ordinario). Pero muchas veces hacemos un uso del saber general y vamos a descubrir el modo en que lo general está en lo particular (éste es un razonamiento o juicio deductivo). Pero, por otro lado, la complejidad de la clínica, por presentar una cantidad ilimitada de características, requiere otras finezas del razonamiento práctico. Frente a las limitaciones del razonamiento deductivo en la práctica clínica hay autores (Miller[1] , Wieland [2] ) que propusieron considerar la adecuación a este fin de la noción kantiana de la facultad de juzgar en el arte y en las ciencias empíricas. La función del juicio reflexionante es la de introducir un modo de inteligibilidad ante la variedad de la experiencia para que ésta no sea un caos. En lugar de conocer lo que el objeto es, el juicio reflexionante trata de decir o meditar sobre aquél procediendo por tanteos y meditaciones. El razonamiento reflexivo no conoce ni afirma, sino que supone, conjetura -de allí la frecuencia con que empleamos el aspecto verbal condicional- que existe algún modo en que el caso encuentra su inteligibilidad, que hay que buscar cómo lo hace cada uno porque no son datos que estén dados a priori. Así entiendo la idea de Miller de un caso sin regla preestablecida.

Siguiendo el planteo de Ian Hacking se puede ubicar que toda persona clasificada es afectada por la clasificación a la que subsume y todo individuo es construido como una cierta clase de persona; a su vez, esa operación no solo afecta al individuo clasificado, sino que hay otro efecto: que el individuo clasificado resignifica la clasificación (efecto bucle). De alguna manera ni la clasificación ni los individuos clasificados se comportan como si fueran entes naturales, no se corresponden con la lógica del individuo y la especie. En las investigaciones de su libro La casuística de Lacan encontramos la tesis que afirma sobre la existencia de una casuística de Lacan. Considerando el recurso a la casuística o a la construcción de casos como fundamental para la transmisión de la práctica psicoanalítica encontramos que su propuesta mantiene abierta y sin descuidar para la formación el ejercicio de lectura e investigación de los casos clínicos clásicos. En la actualidad, en las producciones epistémicas y clínicas de la comunidad analítica, ¿Cómo considera el lugar que tienen, en el trabajo de elucidación, los casos clásicos?

– La respuesta merecería una investigación en sí misma: ¿qué lugar tiene el estudio de casos clínicos clásicos en nuestro medio (habría que acotar "lugar" y "nuestro medio") hoy? Podemos buscar en los catálogos online de las bibliotecas, por ejemplo. En fin, hacer búsquedas bibliográficas en bases de datos, trabajo que no he hecho.

El Hombre De los Lobos me parece uno de los casos más enseñantes del psicoanálisis. En 2011 se publicó por primera vez en español el Curso completo de Jacques-Alain Miller sobre El hombre De los Lobos. Unos años después realicé un Seminario diurno en la EOL dedicado a la lectura del Curso y del caso. Como Sergei Pankejeff había sido paciente de Freud y de Kraepelin encontré contrapuntos interesantes en cuanto al diagnóstico, el modo en que uno y otro construían el caso, desde sus propias categorías o clases. Quise estudiar más la cuestión y escribí al director de los archivos de Kraepelin en el Max-Planck-Institut für Psychiatrie. Quería saber si tenían registros clínicos del caso. Lamentablemente no quedaron registros por diversas razones. Por una parte, él no fue un paciente del Hospital Universitario. Pankejeff fue internado en un instituto privado donde Kraepelin atendía a sus pacientes adinerados. Por otra parte, ese lugar fue destruido completamente durante la Segunda Guerra y no quedaron registros. Luego, del hombre de los lobos, está el testimonio de su experiencia con el psicoanálisis.

Laurent en la Conferencia La época del sinthome (2019) planteó entre otras cosas, que no hay un síntoma de la época, sino que hay múltiples síntomas y que cada civilización por intermedio de sus discursos los distribuye y los clasifica. Para Lacan la civilización actual está comandada por una alianza entre la ciencia y el discurso capitalista que deja un lugar particular y segregado a la creencia subjetiva. Laurent propuso que actualmente los sujetos depositan la creencia en la envoltura formal de goce de los síntomas que padecen. A este movimiento de la civilización y el goce, ubica como una de las causas de la crisis de la clínica psiquiátrica y sus clasificaciones, en esta misma línea encontramos los planteos de Ian Hacking sobre el lugar de las enfermedades mentales transitorias. ¿Qué perspectivas avizora en el porvenir de las clasificaciones, los posibles estallidos clasificatorios y que respuesta posible del lado del analista?

– Cuando se publicó el DSM-5 en 2013 me dediqué a investigar el escándalo científico-político que lo acompañó. La construcción social de las enfermedades mentales era denunciada como tal tanto por los más acérrimos defensores del biologismo como por los críticos, casi anti-psiquiatras, de los movimientos progresistas anglonorteamericanos. Escribí algunos trabajos sobre la heterogeneidad de los grupos críticos, aunados por un enemigo común: la clasificación psiquiátrica.

A continuación, extraemos algunos párrafos del artículo sugerido por Elena Levy Yeyati: Psiquiatría en debate. Una revisión de tendencias críticas actuales en la literatura de origen anglosajón publicado en la Revista Vertex[3] .

"La mayoría de consultas que recibe un psiquiatra excede ampliamente el campo de lo que clásicamente se denominó locura propiamente dicha o psicosis. Una clínica de la infelicidad, la insatisfacción, el desencanto laboral, el fracaso amoroso, el duelo, las dificultades de los niños, el envejecimiento, en fin, efectos diversos del malestar en la civilización contemporánea, resultan diagnosticados como enfermedades y medicados; que en cada nueva edición del manual el número de diagnósticos aumente, nunca se reduzca ¿es causa o efecto de ese estado de cosas?"

"La oposición de enfoques diagnósticos entre la CIE y el DSM puede resumirse en la distinción "prototipos" versus "criterios operacionalizados" donde debe subrayarse la diferencia de perspectiva. Mientras que los prototipos son concebidos como descripciones que dan cuenta de la idea general que se tiene sobre cómo es un tipo determinado de enfermedad o de enfermo, las definiciones operacionalizadas reúnen -como en una definición- una lista de rasgos o criterios que deben estar total o parcialmente presentes en un caso para hacer un diagnóstico determinado. La CIE conserva el contenido que se quiere describir como una narración o prosa; el DSM se escribe como una lista desagregada, sin narrativa, sin contexto".

"Según Insel, la falta de validez científica de las definiciones de los trastornos del DSM se deben: a la ausencia de biomarcadores, el consenso entre clínicos funda su validación, que otras especialidades ya abandonaron el diagnóstico fundado sólo en agrupamientos de síntomas, los síntomas mentales expresan alteraciones cerebrales. Insel propone Research Domain Criteria (RDoC) como una nueva nosología para ser investigada".

"A. Frances quien acaba de publicar un libro donde reúne muchas de sus críticas. En su momento, propuso no reeditar la quinta versión del DSM hasta tener una revisión independiente de las evidencias en que se basaban. También alertó sobre diagnósticos de moda o "epidémicos" (engendrados por una fuerte influencia de Big Pharma, la pobreza clínica y el ansia expansionista de cada grupo de trabajo del manual) y la inflación diagnóstica que asedia la idea de "normalidad". Los diagnósticos más cuestionados por Frances varían la versión del manual que revise. En el DSM-5 denuncia la desaparición del duelo como criterio de exclusión para diagnosticar trastorno depresivo mayor; la medicalización de los caprichos infantiles; del uso de Internet; de los olvidos de la vejez; la expansión del espectro autista; el riesgo de psicosis."

"Psiquiatría viciada de evidencia. Aunque no disponemos de ninguna traducción de sus libros o artículos, desde hace años se difunde entre nosotros el trabajo de D. Healy, psiquiatra e historiador. Healy demostró el modo en que la industria farmacéutica trata los ensayos clínicos según su conveniencia; cómo se logró que algunos fármacos (y no otros) solo se vendan bajo receta; y propuso revisar el sistema de medicina basada en evidencia".

"Periodismo de investigación en medicina, ciencia e industria: El trabajo de R. Whitaker surgió de la contradicción que encontraba entre los resultados publicados por un autor de la Harvard Medical School (según el cual, en EEUU, los enfermos con esquizofrenia habían empeorado en los últimos veinte años) y un trabajo publicado por la OMS que afirmaba que los enfermos psicóticos evolucionaban mejor en los países pobres que en EEUU. Notablemente, en aquellos sólo se mantenía medicado un muy bajo porcentaje de pacientes. Whitaker se basa en evidencias para establecer porqué en las últimas décadas el número de los llamados "enfermos mentales" se triplicó en los EEUU, examinando evidencias que demuestran el daño que podría causar el uso prolongado de psicofármacos".

"Movimientos y redes de usuarios disidentes del paradigma dominante: "Usuarios" y "sobrevivientes" de servicios es una auto-denominación surgida en el mundo angloparlante de personas en tratamiento psi que tuvieron sus primeras formas de organización institucional alrededor de la década de 1980. El énfasis se desplaza del tipo de padecimiento a la experiencia de quienes, por haber sido diagnosticados, tienen derecho a participar de la discusión en torno a los sistemas diagnósticos en uso (…) De tal modo que, mientras que muchas redes definen sus problemas en términos del paradigma biomédico, otras tales como Hearing Voices Network, MindFreedom o Soteria buscan modos alternativos de dar cuenta de la alienación y el malestar".

"Si queremos enriquecer una indagación moderna sobre la clínica, que limite los estragos de la medicalización, será necesario incorporar las discusiones críticas en nuestra formación. Pero hay que ser cautos, conocemos el frenesí mesiánico de la antipsiquiatría. Las críticas actuales en torno a los diagnósticos comprenden diversos aspectos. Estos van desde la discusión de la lógica de las clasificaciones hasta la negación del concepto de psicopatología como objeto de investigación de la psiquiatría. Y, así como sostenemos que el reduccionismo biomédico empobrece el juicio clínico, así, es posible decir que los estudios culturales (que nos tornan más sensibles al contexto donde hoy se enmarca la comprensión de lo mental) no deberían reemplazar los conceptos que organizan nuestras prácticas sino complementarlos".

NOTAS

  1. Miller, Jacques-Alain. El ruiseñor de Lacan. Miller, J.-A., AAVV. Del Edipo a la sexuación. Bs. As.: ICBA-Paidós, 2001.
  2. Wieland, Wolfgang. La razón y su praxis. Bs. As.: Biblos, 1996.
  3. VERTEX Revista Argentina de Psiquiatría. 2015, Vol. XXVI: 229-233. (http://www.polemos.com.ar/vertex120.php)

Artículo completo disponible en el blog SINTHOMA Y CULTURA
https://sinthomaycultura.com/entrevista-a-elena-levy-yeyati/