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El paradigma "neuro": Chips corporales (*)

Por Encuentros

Chips Corporales

Junto al metaverso, basado en la realidad virtual y en la realidad aumentada, surge otra propuesta más ambiciosa que aspira a monitorizar al sujeto a través de chips corporales conectados a las redes neuronales.

Ya no se confía en el algoritmo de las redes sociales, sino que se busca incidir en la materialidad del cuerpo modificando el organismo para conectarlos directamente a las máquinas.

El chip insertado en el cerebro y conectado a las redes neuronales se conecta a un dispositivo externo (ordenador, mobil, tablet) y envía ordenes que el algoritmo ejecuta: jugar a un videojuego, escribir un texto, dibujar, autocompletar una frase pensada, o realizar cualquier otra tarea disponible en el dispositivo. Ya se ha conseguido que un mono juegue sin manos a un videojuego, y en el futuro se espera que usemos diademas neuronales que no requieran cirugía y que permitirán realizar, con la mente, diferentes acciones.

¿Humanidad aumentada, gracias a las tecnologías?

Paralelamente a los avances del metaverso, asistimos también a los progresos de lo que se llama "Ambient Computing" o computación ubicua, en la que tanto Amazon como Google están invirtiendo para construir un mundo real virtualizado como alternativa al metaverso. Se trata de una tecnología invisible (solo se percibe cuando se utiliza), habilitada por sensores y dispositivos conectados entre sí, que pretenden sustituir la pantalla por la interconexión de todos esos dispositivos.

Pero la propuesta más disruptiva respecto a los sensores quizás sean proyectos como Neuralink o Braian Initiative, que pretenden conectar nuestro cerebro a las máquinas para aumentar nuestras capacidades cerebrales. Los avances que suponen los chips corporales es otro modo de crear un universo paralelo o, por lo menos, modificar el actual porque es una intervención en el cuerpo.

Los presupuestos teóricos de esta propuesta tienen que ver con la ilusión del hombre neuronal (Changueux), la reducción de la complejidad del sujeto humano a una parte de su organismo: el cerebro.

El proyecto Brian, seguramente la mayor iniciativa emprendida hasta ahora en relación a la investigación neurotecnológica, aspira a leer el cerebro e identificar la señal que se aspira para cada letra.

Lo neuro parece ya un significante milagroso por lo que promete, tal como lo declaraba un investigador en neurociencias: "He aprendido que la realidad es una construcción de nuestro sistema nervioso", que se añade hoy a la red, otro significante amo actual, y juntos forman la red neuronal.

De hecho, comparten numerosos significantes, como deslocalización, descentralización, flexibilidad, plasticidad o conexión en red, que a su vez forman parte del campo semántico del capitalismo neoliberal.

La llamada neurona de Wall Street sería el paradigma de ese ajuste entre las redes de influencia de los brókeres y las redes neuronales. Donde Max Weber asociaba la ética protestante al capitalismo incipiente, ahora el hombre neuronal y el neoliberalismo irían de la mano.

(*) Extracto del capítulo del libro "¿Bienvenido metaverso?. Presencia, cuerpo y avatares en la era digital" de José Ramón Ubieto y Liliana Arroyo Moliner – Editorial NED (2022)